CONSULTA MEDICA
Antes del viaje consulte a su equipo médico. Ellos le indicarán que precauciones debe tener y como ajustar su pauta de tratamiento.
En algunos casos, también podrán recomendarle algúncentro médico o algún especialista en el lugar de destino, donde pueda dirigirse si surgen problemas.
Si es necesario, además, le redactarán un informe médico donde se especifique el tipo de diabetes que usted padece, el tratamiento habitual que precisa, así como el material que necesita llevar con usted. Este informe le será útil si requiere asistencia sanitaria en el lugar de destino y también en los aeropuertos, para poder acceder al avión con todo el material necesario, sin problemas en los controles de seguridad. Es bueno además llevar alguna pulsera o collar de identificación médica que indique que usted padece de diabetes.
LUGAR DE DESTINO
Es necesario informarse de la cobertura sanitaria del país, así como de la disponibilidad de los medicamentos que utilice habitualmente. En los países de la Unión Europea existen convenios de asistencia, pero es necesario presentar la tarjeta sanitaria.
Es bueno que conozca los nombres comerciales y presentaciones que tienen los medicamentos en el lugar de destino. En cuanto a la insulina, si utiliza viales y jeringas, asegúrese de que la concentración de la insulina es de 100 unidades/ml y que las jeringas están graduadas para esa concentración. Puede obtener toda esta información contactando con la IDF (Internacional Diabetes Federation; Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.).
VACUNACIONES Y PROFILAXIS
La diabetes en principio no contraindica ninguna vacunación ni quimioprofilaxis. No obstante es bueno consultar previamente a su médico y vacunarse al menos 1 mes antes del viaje programado. Así si aparecen efectos adversos o temporalmente se alterase su control glucémico, puede subsanarse antes de emprender el viaje.
DIFERENCIA HORARIA
En viajes de larga distancia, especialmente en avión, alimentación y tratamiento deben adecuarse a la diferencia horaria que se produce.
Así, si se viaja hacia el oeste se ganan horas por lo que puede ser preciso añadir una dosis de insulina y una ingesta.
En los viajes hacia el este, se pierden horas por lo que puede ser necesario obviar una dosis de insulina y una ingesta. En general el tratamiento con hipoglucemiantes orales puede mantenerse sin cambios, pero siempre previa consulta con su médico habitual.
CONSERVACION DEL MATERIAL
Si en el lugar de destino esperamos temperaturas muy elevadas, es bueno llevar una pequeña nevera portátil para preservar adecuadamente la insulina.
Si no es así, el bolígrafo en uso no precisa nevera para períodos inferiores a 1 mes, aunque no debe someterse a la luz solar de forma directa. También el glucagón debe conservarse refrigerado. Evite someter las tiras de su medidor de glucosa a elevadas temperaturas, humedad o sol directo. Los fármacos orales también deben guardarse en lugar fresco y seco.
DOCUMENTACION NECESARIA
Tal y como hemos dicho anteriormente, es necesario llevar algún tipo de identificación o documento donde se advierta que usted padece diabetes. También un informe de su médico especificando el tratamiento habitual y otras consideraciones que puedan ser de importancia, como el material que debe llevar siempre encima, así como la tarjeta o cartilla sanitaria.
Autora:
Dra. Ana Chico, endocrinóloga del Hospital Dos de Maig de Barcelona y miembro de la Junta Directiva de la Sociedad Española de Diabetes. Fecha de revisión: mayo 2006.